Técnicas de anticipación y «foreshadowing» para escritores

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KbYk7xfyEsta semana tenemos un colaborador muy especial entre nosotros, Victor Selles, el escritor detrás del blog de escritura Moral de frontera (buen título para el blog, por desgracia mucho más guay que el mío). Es una especie de superhombre que puede corregir, maquetar y reseñar a nivel profesional. Aquí os lo dejo en toda su gloria:

Esta semana Guillermo Jiménez me cede su espacio para hablar de una figura poco analizada en los manuales de técnicas literarias. Me refiero a lo que los anglosajones conocen como «foreshadowing».

¿Y qué diablos es el «foreshadowing»? Lo cierto es que después de mucho buscar, no he encontrado una traducción en español con la que esté satisfecho del todo. A veces lo llaman «presagio» o «presentimiento», pero en este artículo yo voy a usar indistintamente los términos «foreshadowing» y «anticipación», que me parece lo más adecuado. Y es que el «foreshadowing»  es eso: introducir en la narración alusiones o predicciones de eventos que acontecerán posteriormente de la historia.

Voy a mojarme mucho con lo que voy a decir a continuación (espero no ahogarme), pero creo que no existe un buen libro que no incluya unos cuantos elementos de «foreshadowing».

La anticipación es crucial por varias razones.

En primer lugar, porque convierte un hecho increíble en algo plausible. En la vida real muchas cosas ocurren por azar, pero dentro de la estructura de una novela el azar no suele tener cabida por una razón muy sencilla: el lector no lo encuentra creíble.

Cualquier película de James Bond constituye un buen ejemplo. Una de las escenas recurrentes en la saga del detective británico nos muestra a un personaje llamado Q, cuya función es introducir en la trama varios gadgets de alta tecnología que al final se revelarán útiles en el momento más apropiado. ¿Qué clase de espectador aceptaría sin más que James Bond posee un bolígrafo explosivo si otro personaje no lo hubiera mencionado con antelación?

Goldeneye

En segundo lugar, la anticipación contribuye a añadir tensión a la historia, porque invita a preguntarse qué ocurrirá a continuación. Actúa como un gancho.

Evidentemente, el escritor debe cumplir con todo aquello que promete y no defraudar las expectativas del lector. En otras palabras, si en el primer acto se presenta un bolígrafo explosivo, más vale que en el tercero acabe detonando (y si quieres saber más sobre todo esto, echa un vistazo a la entrada que el propio Guillermo ha escrito para mi blog).

Este ejemplo hace referencia a un objeto, pero la «anticipación» también funciona muy bien para justificar:

  1. Habilidades o talentos especiales: Resulta algo desconcertante que un personaje mencione el cursillo de pilotaje de aviones que realizó hace un par de años justo después de que el piloto del Boeing en el que está viajando se haya quedado inconsciente.
  2. Comportamientos: ¿Por qué un personaje reacciona de un modo determinado ante ciertos acontecimientos? Si algo en su pasado lo justifica es mejor introducirlo de antemano, con naturalidad. Por ejemplo, en Pulp Fiction resultaría chocante que el personaje de Butch (Bruce Willis) volviera a casa para recuperar un reloj de oro, si el guionista no hubiera llamado la atención sobre la importancia sentimental del mismo en un punto anterior de la historia.

Cómo introducir el «foreshadowing»

Dotar de plausibilidad a eventos futuros y contribuir a la tensión son los dos objetivos básicos del «foreshadowing». Los ejemplos mencionados arriba son quizá los más obvios, y los que un escritor suele emplear de forma intuitiva, pero existen muchas otras técnicas que pueden utilizarse para introducir elementos de anticipación:

De forma evidente

Una herramienta similar al «foreshadowing» es la prolepsis, donde en lugar de intuirse un desenlace posible, este se nos muestra directamente. Por ejemplo, podemos hacer referencia a acontecimientos futuros mediante los comienzos «in media res» y los flash-forward. Los primeros sitúan al lector en mitad de la acción (la persecución en coche, el robo al banco, la gran batalla) para sumergirlo en la historia. A partir de ese punto el escritor retrocede en el tiempo, ofreciendo la sucesión de acontecimientos por la cual los personajes llegaron hasta esa situación.

La primera escena de Breaking Bad nos presenta una situación límite. Unos pantalones flotando en el aire, un hombre en ropa interior con una máscara antigás conduciendo una autocaravana que acaba estrellándose en mitad del desierto y una confesión grabada en vídeo mientras resuenan las sirenas de la policía. Vince Gilligan y su equipo de guionistas están ejecutando un comienzo «in media res» en toda regla.

Breaking Bad

Los flash-forward, como su nombre indica, son el mecanismo opuesto a los flash-backs: adelantan acontecimientos futuros. Ambos son técnicas que deben usarse con precaución, y solo si están justificadas, ya que rompen el orden lógico de los acontecimientos y por tanto pueden crear confusión o incluso aburrimiento en el lector.

Los presagios y profecías son otra solución habitual dentro de algunos géneros. Las historias sobre  el Elegido (la sagas de Matrix o las novelas de Harry Potter son quizá los ejemplos más conocidos) juegan con esta premisa para adelantar acontecimientos futuros. Esto funciona bastante mejor cuando la información que ofrece el escritor es críptica o da pie a distintas interpretaciones. Muchas fuentes clásicas han dejado constancia de lo confusas que podían ser las profecías de los oráculos en la antigüedad. El de Delfos le aseguró al rey lidio que si atacaba a los persas destruiría un gran reino; alentado por la profecía, decidió atacar y como consecuencia acabó destruyendo el suyo.

Adelantar información equívoca sobre un acontecimiento futuro (o la maniobra de distracción que intenta conducir a los lectores a una conclusión falsa), se conoce en literatura con otro término anglosajón de difícil traducción: el «red herring». El objetivo es introducir el elemento sorpresa cuando se desvela el engaño pero, si no se hace bien, puede provocar frustración. Se usa con frecuencia en la novela policíaca, dirigiendo las sospechas sobre algunos personajes que al final resultarán ser inocentes.

 

De forma sutil

El «foreshadowing» también puede ser introducido de una forma sutil, creando subtexto y capas de interpretación en la historia, tratando de reforzar el simbolismo o un mensaje determinado.

En La última cruzada, cuando un personaje indica a Indiana Jones que se encuentran ya muy cerca del Santo Grial, Indy responde: «Es en estos casos cuando el suelo cede bajo tus pies». Con estas palabras, que parecen casuales, está presagiando la futura destrucción del lugar que alberga la reliquia. Son como un pequeño temblor antes del terremoto.

Esta táctica puede usarse también de un modo más intensivo y sistemático. Por ejemplo, durante la primera parte de Parque Jurásico el espectador recibe multitud de ejemplos de anticipación antes de que los sistemas de seguridad del parque sean desactivados y la situación estalle definitivamente.

En la escena del helicóptero, casi al principio de la cinta, Alan Grant intenta abrocharse un cinturón de seguridad defectuoso. Más adelante, varios personajes  levantan sin demasiado esfuerzo unas barras de seguridad y abandonan una sala en mitad de la presentación. Después se repite la misma escena, en este caso abriendo las puertas de los vehículos para acercarse al triceratops enfermo. Hay todavía más ejemplos a lo largo de la película, pero los que recopilo aquí son quizá los más representativos.

Jurassic ParkNota del lecturonauta: Cuesta apreciarlo, pero es un cinturón de seguridad lésbico. 

Se pueden alcanzar niveles todavía mayores de sutileza en el uso de la anticipación. Una de las primeras frases de Adiós a las armas, de Ernest Hemingway, dice: «Aquel otoño, las hojas cayeron de forma prematura», advirtiendo al lector sobre las muertes que se han producido antes de tiempo.

Los cambios climatológicos también se han utilizado con frecuencia en la literatura para predecir desastres futuros, en ocasiones llegando a convertirse en un cliché.

La propia voz narrativa, en según qué casos, también puede ejercer su cualidad inmanente e introducir el «foreshadowing» con frases del tipo de: «Fred pensó que sus problemas habían terminado por fin. No sabía cuán equivocado estaba». A veces una simple premonición del protagonista, una sensación irracional al salir de casa o al contemplar a un hombre en la calle, pone en aviso al lector sobre elementos narrativos importantes que pueden jugar un papel en el futuro.

Por último, un escritor también puede utilizar los títulos de cada uno de los capítulos de su novela para introducir acontecimientos que sucederán a lo largo del mismo. Por poner un único ejemplo, el primer capítulo de El Hobbit se titula “Una visita inesperada”, presagiando el encuentro de Bilbo con Gandalf.

¿Cuál es el mejor?

En los ejemplos tratados podemos apreciar que el «foreshadowing» puede introducirse de forma sutil o evidente. Cualquiera de estos dos sistemas es válido, pero el escritor debe tener cuidado para no provocar un efecto contrario al deseado. Esto ocurre cuando no se sabe dosificar la información correctamente y se revela demasiado, o demasiado pronto.

El énfasis es también un factor importante.  En algunos casos la anticipación puede plantearse como un puñetazo en la cara y en otros debe funcionar a un nivel casi subconsciente, con el propósito de construir una atmósfera.

Además hay que tener en cuenta que no todos los acontecimientos de una novela necesitan recurrir al «foreshadowing». Abusar de esta técnica puede causar un efecto ridículo, sobre todo cuando el escritor le da relevancia hasta a los aspectos más nimios del relato.

El exceso es tan malo como el defecto.

Conclusiones

La mayor parte de los escritores hacen uso de la anticipación de una forma intuitiva. Sin embargo, creo que conocer esta herramienta puede resultar ventajoso, ya que nos permite ser más consistentes y concienzudos a la hora de aplicarla.

Esto se revela especialmente útil al trabajar en la segunda versión de un manuscrito, cuando el escritor ya tiene una visión global de la historia y sabe qué elementos son importantes y cuáles merece la pena destacar.

Sin más, me despido agradeciendo a Guillermo que me haya cedido un espacio en su bitácora. Si os ha gustado este artículo podéis leer otros similares sobre técnicas literarias en mi blog, junto con otras reflexiones sobre escritores y literatura.

Para saber más

En estos enlaces (me temo que todos en inglés) podréis encontrar mucha más información sobre el «foreshadowing» y algunos de los ejemplos que he utilizado aquí:

Elements of cinema

Las ocho normas del «foreshadowing»

Nueve ejemplos de anticipación

8 respuestas a “Técnicas de anticipación y «foreshadowing» para escritores

  1. jd 29 julio, 2018 / 11:29 pm

    Hola, me parecio una gran coincidencia que yo estudie psicologia y este escribiendo un libro de fantasia

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    • GuilleJiCan 30 julio, 2018 / 5:03 pm

      ¡Eso es genial! Entonces el blog te encantará, imagino.
      ¡Mucho ánimo con la carrera y con el libro, que ambas son malas bestias!

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