Un día, Emma Coats, artista de storyboard de Pixar, subió a twitter las 22 reglas del storytelling de Pixar. Literautas las tradujo al español y las compiló. Y yo me encargué de destriparlas una a una.
Es raro que se diga por qué los consejos o reglas sobre escritura son buenos o útiles. Yo hoy os voy a contar qué razonamiento hay detrás de cada una de esas reglas.
Regla número 5: Simplifica y enfoca. Combina personajes. Sáltate los desvíos. Sentirás que pierdes algunas cosas valiosas, pero te hará libre.
Esta es una regla muy difícil de cumplir para muchos.
Recordemos que es una regla de Pixar, y las películas de Pixar son simples. No se van por derroteros ni presentan tramas extrañas. El argumento toma todo el foco de atención (con una pequeña subtrama ligada al mismo). La cuestión es buscar el mínimo.
Esto ya entra en un pequeño debate. Hay gente a la que le gusta expandirse, y hay gente a la que le gusta simplificar. Debido al medio en el que trabaja Pixar, que es el audiovisual, es normal que prefieran tirar a lo simple: Hay un límite de metraje que llenar y la paciencia del público no es infinita. Y luego está gente como Tolkien, para el que nunca es suficiente. La verdad es que esto no va de si algo es largo o corto. Sino si de si es sencillo o complejo.
¿Cuánto puedes eliminar de tu historia sin que se desmorone?
Esta búsqueda de simpleza sigue una lógica: Todo lo que incluyas en una historia debe cumplir una función vital para lo que estás contando. Como dice Pixar, a veces tienes que sacrificar cosas. Pero recortar todo lo que no sea vital es bueno. ¿Por qué tener dos personajes que cumplen funciones distintas, pudiendo combinarlos en uno? ¿Por qué mostrar esa ciudad perdida, si podríamos eliminarla y la historia no cambiaría en absoluto?
Lo difícil es decir lo máximo con lo mínimo. Es el verdadero mérito de un escritor.
Sé eficiente. Recorta. Si algo no cumple ninguna función vital para la historia, mátalo.
Aunque para ello tienes que comprender que, cuando nos referimos a vital para la historia, no significa que sea algo que haga avanzar la trama. Recordemos la escena en que el padre de Nemo lo lleva al colegio. Esta escena cumple una función: Mostrarnos como son los personajes en su rutina, darnos un punto de partida para los cambios que se darán en los personajes. En vez de mostrarnos que la rutina se repite, lo simplifica, dejando claro que eso es algo habitual, sin necesidad de mostrarlo.
Algo puede servir como ambientación, desarrollo de personaje, o tono, y no avanzar propiamente la historia. Sin embargo, cumple una función vital.
Intenta llevar tus historias al mínimo. No necesitan más.
¡Todas las reglas de Pixar!
Regla 2: Métete en la cabeza de tu público
Regla 3: Busca el tema al final
Regla 4: Usa la estructura universal
Regla 6: Desafía a tus personajes
Reglas 8 y 9: Aprende a terminar – Aprende de lo que no quieres
Regla 10: Analiza las historias que te gustan
Reglas 11 y 12: Escribe tus ideas – Sorpréndete
Regla 13: Haz que tus personajes tengan opiniones
Regla 14: Busca el corazón de tu historia
Regla 16: ¿Qué es lo que está en juego?
Reglas 17 y 18: No tengas miedo a equivocarte – Conócete a ti mismo
Reglas 20 y 21: Analiza las historias que no te gustan – Identifícate con tus personajes
lecturonauta.wordpress.com 
Para mí, es difícil encontrar un equilibrio. En mis primeros escritos quería contarlo todo y describía demasiado los escenarios pero me dí cuenta de que lo único que conseguía con eso es dormir al lector. Ahora intento ser más conciso, pero a veces no se si me paso de breve. Lo bueno es que tengo toda una vida para aprender y mejorar.
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Por supuesto, siempre hay que encontrar el punto que a uno más convenga. Teniendo en cuenta el formato de películas que utiliza Pixar, no es extraño que quieran algo más sencillo.
Muchas veces no se trata de decir menos. Es decir más con menos palabras.
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Es cierto que los novelistas tenemos la tendencia de extendernos demasiado, sobre todo los que escribimos fantasía. Sin embargo, tienes razón al decir que es más difícil lograr el equilibro en la literatura que en el medio audiovisual. Dicho esto, la cruz de la cuestión es definir qué es «vital» para una historia y qué no. Hay autores que afirman que las escenas que no hagan avanzar la trama no sirven. Sin embargo, muchos lectores apreciamos un momento de respiro, alguna escena introspectiva que nos permita echarle un vistazo a la mente del personaje y conocerlo mejor.
Gracias por la entrada.
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De nada, Ana, no sabes la ilusión que me hace descubrir que lees mi blog ^^ yo sigo el tuyo desde hace muchísimo.
Respecto a lo de vital, yo cambiaría lo de «escenas que no hagan avanzar la trama» a «escenas que no cumplan una función específica, a ser posible, varias».
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Nos resulta difícil a varios, creo. Tendemos a usar más palabras de las necesarias, y coincido: «más que no hacer avanzar la trama, que no cumplan una función dentro de la historia». Es un consejo en el coinciden muchos: recorta, usa las tijeras, elimina lo que no tiene funcionalidad dentro de la historia. Vamos aprendiendo 🙂
Gracias por tu entrada, te leo siempre y todo me resulta muy útil.
Abrazo creativo.
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Abrazo creativo a ti también ^^ La verdad es que es uno de los consejos vitales en este oficio. En el momento en que no sobra nada ni falta nada solo queda pulir el texto. ¡Me alegra que te sean útiles las entradas!
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